Los tres pilares del cine: productor, director y guionista.

Quizá la gran mayoría de los lectores sabrá que estás tres figuras del mundo del cine son los principales responsables de un filme y que, de allí, derivan las demás figuraciones que compondrán toda la producción de un proyecto cinematográfico.

Pero ¿Conoces como se va formando la idea hasta ponerla en la gran pantalla?

La idea de producir una película no tiene un autor específico, está puede venir de cualquiera de los tres, del productor, del directo o del guionista e incluso de cualquier otra persona que quiera compartir su idea con alguno de ellos (siempre y cuando sea atractiva y original). Lo cierto es que, sea el productor, director o guionista, necesitará de los otros dos para llevar a cabo su proyecto.

No obstante, hay que resaltar que en muchas ocasiones (y esto suele ser muy habitual) el director suele ser el mismo guionista, por lo que podríamos decir que no necesariamente habrían tres figuras físicas, sino tan solo productor y director.

El proceso de creación

Explicaremos esto haciendo uso de las tres figuras por separado, productor, director y guionista.

Cuando un productor tiene una idea bastante clara de una historia que podría llevar a la gran pantalla, en primer lugar, necesitaría de un guionista que escriba el guion de esa idea y, una vez que esta ya esté a una edad madura (no necesariamente finalizada) el productor tendrá que contratar a un director que lleve a la pantalla ese guion.

Esta claro que una persona no tendrá las mismas ideas que otra, a qué me refiero con esto… a qué, si el productor es el de la idea inicial, este tendrá más poder sobre como se escribirá el guion, es decir, el guionista estará a la supervisión del productor, quien decidirá si el guion necesita una modificación y aportara sus propias ideas, este de acuerdo o no el guionista.

Lo mismo sucedería si el guionista es quien inicia con la idea y con el respectivo guion de la misma. En este caso el productor podría hacer pocos o nulos cambios en la escritura e ideas del guion, sin embargo, esto no significa que él no pueda dar sus propias ideas, eso si, el guionista decidirá si las toma en cuenta o no.

Cuando productor y guionista tengan muy avanzado el guion (o terminado) entrará en juego el director, aunque lo habitual es que este se incorpore al proyecto desde mucho antes. Aquí daríamos comienzo al procesado de pre producción, donde el productor hará las respectivas contrataciones, por ejemplo, ayudantes de dirección, producción, directores de foto, sonido, arte, etc… para comenzar con la planificación de la producción o rodaje del proyecto.

Lo que se llevará a cabo en la pre-p reducción

La pre-producción vendría a ser como la logística en un almacén, donde se pondrá todo en orden para realizar la producción con el menor coste posible, ahorrando tiempo y dinero. Se harán visitas a las posibles localizaciones, se elaborarán documentos como guion técnico, plan de rodaje, plantas de cámara, castings, contratación del equipo técnico y artístico, es decir, toda la planificación de la siguiente fase que es la producción de imágenes y sonido, también conocida como rodaje.

El rodaje

El rodaje es la creación de los brutos, es decir, de la imagen y sonido de la película. Para la gran mayoría supone ser como la parte más divertida de toda la producción. Y esto se debe a qué en ella se suscitan viajes a las localizaciones, estadías en hoteles (sin mencionar que haces crecer tu lista de contactos, porque créeme, es imposible no hacerte amigo de muchos en el equipo), el trabajo en equipo donde, quiérase o no, se es muy divertido compartir con todo el elenco y figuras técnicas del proyecto.

La post-producción

Esta fase supone el trabajo de un equipo algo más reducido, puesto que aquí es donde se van uniendo las diferentes secuencias que se han filmado en el rodaje. En ella participan los montadores junto al director, quienes van dando la correcta forma a la película. Está de más decir que en esta fase, todo el resto del equipo de producción estará básicamente en casa, ya que sus labores habrán terminado.

Sin embargo, es importante resaltar que el montador se incorpora a la producción normalmente dos semanas después de haber comenzado el rodaje. Una vez que se incorpora al proyecto, comienza a trabajar montando los planos de acuerdo a la historia. Si, por alguna razón, algo no va bien o hay planos faltantes, este se lo hará saber al director.

Y de esta manera, y de forma muy resumida, es como funcionan los tres pilares de una producción cinematográfica, esta, en la gran mayoría de los casos, porque, si vien así es la forma de trabajar en España, al menos, puede que en otros países sea algo distinto. Pero vamos, no será mucha la diferencia.